Como ya comentamos en otro post (captura de un enjambre), las abejas tienen un papel esencial en nuestro planeta, forman parte del denominado ganado semoviente productivo, por tanto, son consideradas especie protegida.
Desde hace unos años, bomberos de Granada realiza numerosas salidas para retirar enjambres de zonas donde puedan resultar molestas o algo peligrosas para las personas, y las trasladamos mediante una caja contenedora, llamada núcleo, a un apicultor para que se encargue de su cuidado
Cualquier pequeña fisura en un falso techo o cámara de aire entre muros, puede convertirse en un confortable lugar para albergar una colmena.
Lo primero que hacemos, es descubrir el enjambre. Aquí lo tenemos.
Lo más seguro es que la reina, se encuentre protegida en el centro de esta caja fuerte blindada por miles de aguijones.
Llevamos un equipo un tanto especial, y, aunque pertrechados con traje, guantes y capucha, siempre recibimos algún picotazo.
Tratamos de introducir a la reina en el núcleo, y esperamos a que al son de ésta, vaya entrando el resto.
Tras precintar la caja con el mayor número de abejas dentro, siempre hay alguna despistadilla que no entra en el núcleo, concluimos nuestro trabajo.
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